El Poliedro de Caracas ha sido escenario de espectáculos de antología, de esos que quedaron en el recuerdo de quienes los vivieron. Por ese domo han pasado luminarias nacionales e internacionales de todos los calibres. Este coso cultural abrirá también sus puertas al Festival Latinoamericano de Música, evento que ya está a punto de caramelo, pues comienza este viernes.
En el Poliedro se realizará una tarde-noche metalera, en la que seis agrupaciones de este género, en diferentes estilos, pondrán a los roqueros a agitar melenas y a gritar cada una de las canciones que, de seguro, retumbarán oídos.
A la cita, a vivirse el próximo 3 de diciembre, acudirá una banda legendaria: Rata Blanca. Esta agrupación es una de las más importantes de habla hispana en su género. En su carrera también han incorporado hard rock, power metal, speed metal y metal neoclásico. Tienen una dilatada carrera que comenzó en 1986 y, desde entonces, no han parado en la cosecha de éxitos tras éxitos. Uno de sus discos más importantes es Magos, Espadas y Rosas, un clásico.
A Rata Blanca la acompañará Carcass, una banda británica procedente de Liverpool que se caracteriza por sus ritmos llenos de energía, crudos e intensos. Los amantes del rock duro se darán un festín con estos ingleses.
Estarán también sobre la tarima los colombianos de Masacre. Son una banda de death metal de la ciudad de Medellín, que se formó en 1988. Sus letras evocan símbolos metaleros y sus ritmos son duros.
Los del patio
A estos tres invitados internacionales los acompañarán tres grupos nacionales que saben tocar metal.
Primero tenemos a Krueger, una de las bandas emblemáticas de death metal del país, pues es una de las pioneras de este estilo en Venezuela. Su formación data del año 1990 en Caracas.
Segundo están los muchachos de Guerra Santa, conjunto de power metal que nació en San Cristóbal en 1991. Han compartido tarima con exponentes del rock venezolano, como Zapato 3.
En tercer lugar está Technical Work (TW). Estos jóvenes tienen una propuesta que incluye en sus interpretaciones tambores de la costa que fusionan con el metal progresivo, lo que les da un estilo particular y único.
Fuente : CIUDAD CCS
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